“Si hay algo que caracteriza a este gobierno es que asumimos los problemas, los reconocemos y nos hacemos cargo. Nosotros aceptamos que hemos tenido corrupción en la fuerza policial y valoramos la presencia de la Gendarmería en la ciudad de Rosario -indicó el ministro en declaraciones periodísticas-, pero Santa Fe no es la única provincia que tiene problemas con el narcotráfico”.
“La causa de la efedrina tiene origen en la provincia de Buenos Aires y el lugar del país donde más se consume droga es la Ciudad de Buenos Aires, pero nadie dice que el problema es de Daniel Scioli o de Mauricio Macri. En cambio, sí se afirma que en Santa Fe el problema es del socialismo”, contrapuso Galassi, al tiempo que reclamó “un plan nacional de combate contra el narcotráfico, en coordinación con la justicia federal, que tiene la responsabilidad primaria del combate a ese delito”.
Al respecto, consideró que Argentina debe contar con “un plan de seguridad a nivel nacional, como tiene cualquier país del mundo en el que se planifique desde los mayores niveles de decisión hacia abajo. Por la complejidad que hoy tiene el delito, la planificación de la seguridad tiene que partir de la Nación no sólo en el despliegue de las fuerzas sino de los recursos, de la inteligencia criminal, con una fuerte colaboración de las provincias, y ahora también los municipios y las comunas”.
Galassi también señaló la necesidad de “articular acciones a nivel regional. Si sabemos que la marihuana entra mayoritariamente de Paraguay y no articulamos políticas con ese país, si no establecemos políticas con Bolivia, Perú y Brasil, nunca vamos a resolver ese ni ningún otro tema”, advirtió.
“Al mismo tiempo -continuó el ministro-, si pretendemos combatir a las bandas de narcotraficantes, pero cada vez hay más consumo e, inclusive, un consumo social aceptado, hay que asumir que se está alimentando esa misma cadena, que en un punto es terriblemente violenta y lacerante para la sociedad”.
LA PRESENCIA DE GENDARMERÍA
“Siempre es positivo sumar efectivos de una fuerza federal, que complemente lo que hace la Policía”, afirmó el funcionario, quien agregó que el gobierno provincial “solicitó en reiteradas oportunidades la presencia de gendarmes en la ciudad de Santa Fe, pero la decisión es del gobierno nacional”.
“Vamos a seguir insistiendo en que la Gendarmería esté en todo el territorio de Santa Fe porque esa es la concepción misma de la fuerza, lo mismo que la Policía Federal y la Prefectura: deben estar desplegadas en todo el país y hoy lamentablemente están concentradas en Capital Federal y en el Gran Buenos Aires en su gran mayoría”, señaló Galassi.
No obstante, el ministro afirmó que “hoy hay más de 80 móviles de la policía provincial patrullando la ciudad de Santa Fe y hay alrededor de 130 en la ciudad de Rosario. En la capital provincial nosotros hemos reforzado el patrullaje de la Policía provincial a partir de que el gobierno nacional envió la Gendarmería a Rosario”, explicó.
AGENTES DE LA POLICÍA COMPROMETIDOS
El ministro también se refirió a la Policía de Santa Fe: “Es verdad que hemos tenido, y lo decimos con dolor, muchos agentes que en lugar de cumplir con la misión sagrada de defender a sus conciudadanos, para lo cual el Estado los arma, han terminado comprometidos con el delito”, reconoció, aunque afirmó que “la gran mayoría está trabajando con dignidad y cumpliendo su tarea, y es a los que vamos a apoyar y defender”.
Galassi desestimó que pueda reeditarse un conflicto policial como el de diciembre del año pasado. “Más allá de que fue un conflicto que se originó en Córdoba y también se extendió a Buenos Aires, Entre Ríos y otras provincias, entendemos que no hay condiciones y, además, en Santa Fe, hubo una respuesta judicial porque hubo algunos que cruzaron una línea, dañaron móviles policiales y tuvieron actitudes muy hostiles”, remarcó.
“Nuestro gobierno también implementó mejoras salariales y en los adicionales específicos. Creamos un Comité de Higiene y Seguridad para que también allí planteen cuestiones específicas de la fuerza, cuyos representantes fueron electos por los propios compañeros, tanto policías como personal del Servicio Penitenciario”, precisó el ministro.
Además, Galassi recordó que en estos meses “los agentes están cobrando 3.600 pesos para la compra de uniformes, el bono de 1.700 pesos que perciben todos los trabajadores públicos y el medio aguinaldo antes de Navidad”.