Tomando nota de la compleja situación que atraviesa el sector de producción láctea en el país y específicamente en la provincia de Santa Fe, el Senador Felipe Michlig presentó un proyecto de declaración, que fue aprobado por la Cámara de Senadores de la Provincia, expresando su preocupación e “instando fervientemente a que el gobierno nacional convoque a los distintos actores de la cadena láctea a fin de que los productores puedan retomar sus actividades sosteniendo sus emprendimientos de manera rentable”.
En los fundamentos de su proyecto, el Senador por el Departamento San Cristóbal, alude que, aunque la problemática no es nueva, en los últimos días los productores y ordeñadores de la región han comenzado a movilizarse frente a la decisión de las industrias de rebajar aún más el precio que pagan por la materia prima. El senador resaltó que los problemas en la rentabilidad que atraviesa el sector son el producto de múltiples factores, entre ellos de un tipo de cambio retrasado, políticas nacionales que no incentivan la exportación y un aumento de los costos en los insumos para la producción debido a la incesante inflación. Además, reclamó al gobierno nacional que haga público el estudio de competitividad sobre el sector lechero llevado a cabo tiempo atrás, de modo que se puedan conocer realmente cuales son los márgenes reales de rentabilidad de cada eslabón de la cadena de producción.
Michlig detalló que tanto la Asociación de Productores Lecheros de la Argentina (APLA), como la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe (MEPROLSAFE), vienen advirtiendo de la urgencia y gravedad del problema y por ello han puesto en marcha distintas medidas de fuerza que finalmente desembocaron en cortes de ruta y la posibilidad de bloqueo de usinas lácteas.
Concluyendo su exposición en el recinto de la Cámara Alta, el legislador sostuvo que el Estado Nacional debe abordar seriamente esta problemática, con políticas sustentables en el tiempo y no solo con subsidios tendientes a solucionar inconvenientes coyunturales, ya que la actividad láctea es extremadamente sensible debido a que es altamente vulnerable ante la variación de los precios y de las condiciones climáticas. Por ello es necesario que los productores de leche puedan tener acceso a políticas de promoción y estímulo que ayuden a sostener la actividad, logrando que las familias rurales no abandonen el campo, pudiendo apostar a que el fruto de su trabajo les permita vivir de manera digna.
Oficina de Prensa Senador Felipe Michlig