El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, afirmó que desde la oposición «quieren hacerles creer a los argentinos que hay una campaña sucia, pero decir la verdad no es campaña sucia. Diciendo la verdad no se le falta el respeto a nadie»
Durante un encuentro con jóvenes entrerrianos en la ciudad de Rosario del Tala, el mandatario provincial les pidió que «militen casa por casa y saquen lo mejor de cada uno para caminar pueblos y ciudades para que no tengamos un gobierno que representa a lo más recalcitrante de la oligarquía argentina, que tiene como mascarón de proa a Mauricio Macri».
«Hay una sola persona procesada por hacer una campaña sucia en la Argentina y es Jaime Durán Barba, que es quien ahora quiere instalar junto a Mauricio Macri, que a la vez está procesado por escuchas ilegales, que nosotros hacemos una campaña sucia. Lo que hay ante un balotaje en cualquier parte del mundo es confrontación de ideas y de equipos, pero ellos no quieren mostrar sus equipos», continuó.
En ese marco, se preguntó: «¿Por qué Mauricio Macri no se anima a decir quién va a ser su ministro de economía?, porque si dice quien es vamos a saber cuáles son las medidas que van a llevar a la miseria y al hambre al pueblo argentino».
«Pregunten a los laburantes quién creen que les puede cuidar mejor su trabajo: si Oscar Cuartango, ministro de Trabajo de Daniel Scioli que gestionó junto a Carlos Tomada todas las políticas de estos años, las paritarias y los nuevos derechos, o Patricia Bullrich, que le bajó el 13% a los jubilados. O quién puede cuidar mejor las conquistas en materia económica: si Miguel Bein o Silvina Batakis, surgidos del campo popular, o Carlos Melconián, que quiere ajuste, megadevaluación, suba de tarifas, eliminación de subsidios y demás medidas que golpean al bolsillo de los trabajadores», comparó luego.
Urribarri señaló que se está «ante un momento bisagra de la historia» y aseguró que «estos días van a marcar a las generaciones que vienen y van a definir si volvemos 12 años para atrás o cuidamos lo que se hizo y vamos por lo que falta. A eso no lo logra nadie desde un canal de TV o un diario, sino la militancia y el pueblo argentino», definió.
«Les tenemos una fe enorme y queremos que tomen la posta», les dijo el gobernador a los jóvenes, a quienes les habló «desde el corazón, en un momento muy especial que vive el país».
«Tenemos la enorme e histórica tarea de poner a Daniel Scioli en la Casa Rosada, para que no coloquen a un títere que les devuelva los privilegios que Néstor y Cristina le sacaron, gobernando en favor del pueblo», sostuvo, antes de pedir «tener fe, mucha fuerza, militar y sacar lo mejor de cada uno para hacer lo que más nos gusta: rompernos el alma caminando pueblos y ciudades para que no tengamos un gobierno que representa a lo más recalcitrante de la oligarquía argentina, que tiene como mascarón de proa a Mauricio Macri, en esa alianza tan parecida a la otra, que nos hizo tanto daño».
Cuestionó a quienes «se quejan porque no pueden comprar dólares para viajar por cuarta vez a pasear en el exterior y no tienen en cuenta que en nuestro país hubo un tiempo en el que no había ni siquiera pesos. No hay campaña sucia ni interés de ensuciar a nadie, sino de ayudar a la gente a reflexionar y a refrescar la memoria», finalizó.