El Ministerio de Seguridad de la provincia, a través de la Subsecretaría de Control de Armas, puso en marcha el Registro Balístico de Armas para los nuevos ingresantes a la fuerza policial. Tanto en las unidades regionales I y II, departamentos La Capital y Rosario, desde el viernes y hasta el día de hoy se está realizando este proceso de registro de armas para aquellos agentes que egresaron este año del Instituto de Seguridad Pública (ISeP) y que ya forman parte de la Policía de la Provincia. En los próximos días se realizará lo propio con los nuevos agentes del resto de las unidades regionales.Entre los objetivos de este banco de datos se encuentra el de asentar de forma orgánica y sistémica el listado de las armas reglamentarias que el Ministerio de Seguridad asigna a los nuevos efectivos policiales.
Asimismo se busca reservar y conservar adecuadamente la ojiva del proyectil con su correspondiente vaina (ya disparada), de cada una de las armas provistas; como también permitir la realización de búsquedas rápidas de la relación entre las evidencias delictivas, armas y su portador, incrementando la velocidad de procesamiento y la resolución de los procesos.
CONTROL, SENSIBILIZACIÓN Y DESARME
El ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, dijo que “en el marco del Plan de Seguridad Democrática que el gobierno lleva adelante, esta iniciativa se inscribe en las acciones de control de armas, sensibilización y desarme de la sociedad civil”.
“Este es el enfoque central –continuó Lamberto– que tiene esta área nueva que funciona bajo la Secretaría de Seguridad Pública. Comenzamos en estos momentos con las acciones de control de armas reglamentarias, es decir, las que portan las fuerzas de seguridad y, principalmente, la Policía”.
Con relación al inicio de este registro, el ministro dijo que “tener un banco de datos completos sobre el arma, los proyectiles y a quién pertenece, permite seguir la trayectoria de la misma más allá de lo que pueda ocurrir con ella”.
“En la prueba balística que se realiza conservamos una muestra de bala testigo, que sería la huella digital del arma, lo que será de utilidad para el caso de que un fiscal solicite la pericia de la misma”, señaló el funcionario.
Lamberto afirmó que “esta es una primera etapa que la realizamos con los nuevos ingresos que se producen en las unidades regionales I y II, para luego avanzar con el resto”; y adelantó que “la meta es poder también llegar, en algún momento, a registrar las armas y proyectiles de los más de 19 mil efectivos policiales; es decir, hacerlo extensivo a toda la Policía”.
EL PROCESO EN TRES PASOS
El proceso completo para el registro del arma y sus proyectiles conllevan tres instancias. En tal sentido, el subsecretario de Control de Armas, Matías Palavecino, explicó que “en primer lugar los agentes recién ingresados reciben el arma reglamentaria y las municiones y firman una planilla por triplicado donde se deja constancia de los datos personales, los del policía actuante, y los del arma. Estos últimos son: tipo de arma, el sistema de disparo, la marca, el calibre y la cantidad de cartuchos”.
“De las tres –agregó Palavecino–, una copia se la lleva el efectivo policial, otra va a la unidad regional y otra queda en la Subsecretaría de Control de Armas, dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública”.
La segunda instancia del proceso consiste en la prueba balística. En ese acto se realiza un disparo donde queda a resguardo la ojiva del proyectil con su correspondiente vaina, a los fines de identificar e individualizar el arma de fuego según las estrías que quedan impresas en la ojiva y en las marcas de las vainas producto de su accionar.
Palavecino destacó que “el agente se encuentra presente en todo este proceso”, y por último señaló que “como última instancia, un instructor de tiro brinda algunas consideraciones a modo de repaso de lo aprendido en el Instituto de Seguridad Pública (ISeP), y luego los efectivos se dirigen al polígono para una instancia de práctica con las nuevas armas que portarán en su trabajo diario”.