Días atrás el intendente Busquets, en desafortunadas y groseras declaraciones, trató de “kiosko” al Concejal Fernando Maletti, refiriéndose a que está lleno de “boludeces”.-
Tal expresión, vulgar, soez e irrespetuosa, es impropia de quien detenta el cargo de Intendente.- Más allá de sus limitaciones, le recordamos al Sr Intendente que el respeto es un valor que permite a una persona reconocer, aceptar y apreciar las cualidades del prójimo y sus derechos en el marco de una sociedad.- Ese respeto se manifiesta tanto en el trato a las personas, o hacia las leyes, como así también hacia las autoridades, como sucede en el caso de los alumnos y sus maestros o los hijos a sus padres.- Ese respeto permite que una sociedad viva en paz, en sana convivencia en base a normas e instituciones.- Por el contrario, la falta de respeto genera violencia y enfrentamientos estériles, como los que se desprenden de sus dichos.-
A tenor de sus lamentables declaraciones, tales valores brillan por su ausencia.-
Si Usted se siente dolido por las expresiones del Concejal Maletti, debería contestar los hechos que se le atribuyen o imputan, no sólo a aquél, sino a toda la sociedad, pues son cuestiones que hacen a su gobierno.- Debe dar explicaciones al pueblo, no descalificar a quien lo cuestiona.- Eso es lo que emana del principio del respeto y la representación Institucional.- Mal que le pese, el Concejal Maletti representa a un amplio sector de la población, y expresa inquietudes sociales que le son planteadas.-
Usted no puede reaccionar como un histérico cuando le cuestionan por los caminos rurales, o por el pésimo estado de las calles, o por la falta de información de cómo se ejecuta los dineros de los Ceresinos o por la falta de obras. Pues son planteos que realiza cualquier ciudadano, ante la evidencia de la inacción suya en cubrir esos servicios.- Tampoco puede descalificar y agredir porque le pregunten que paso con los $12.000.000 que anunció, el entonces Ministro Julio de Vido, para la construcción de una nueva Terminal para Ceres, la famosa obra pública sospechada.- Explique las cosas, en lugar de descalificar.-
Nos extraña que luego de tantos años en el poder se ponga tan nervioso y se desubique de la manera que lo hizo.- Trate en lo sucesivo de ser equilibrado, mesurado y respetuoso.- Trate de responder las preguntas y los cuestionamientos, en lugar de descalificar y agredir con expresiones vulgares.- Recuerde aquella máxima que reza: “No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti”.-