Con un spot casero y una conferencia de prensa de ministros, el Gobierno Nacional anunció la semana pasada una serie de medidas para “aliviar” el bolsillo de los argentinos frente a la crisis económica y social que atraviesa el país.
Congelamiento de tarifas, precios esenciales sostenidos durante seis meses para reactivar el consumo y beneficios especiales para quienes reciben planes sociales son algunos de los puntos centrales en el PDF que el Gobierno hizo para comunicar el paquete económico de cara a las elecciones presidenciales de octubre.
Sin embargo, el “alivio” no llega al combustible y se estima que en mayo habrá una suba de hasta un 10% en el precio de la nafta.
“Todo indica que como ya en abril hubo atraso en el aumento y, teniendo en cuenta los valores actuales del crudo y del dólar, en mayo sería más que probable un aumento”, explicó Carlos Gold, presidente de CECHA (Confederación de entidades del comercio de hidrocarburos y afines de la República Argentina).
Es que en lo que va de abril, el crudo Brent, un comodity que se negocia en Londres y es independiente de lo que ocurre en Argentina, ya lleva un aumento de un 9% y cerró en torno a los US$ 74 por barril. Si a esto le sumamos la disparada del dólar, desde las petroleras sostienen que los precios están atrasados entre un 6 y un 10% y ese porcentaje podría ser el que impacte en los surtidores a partir de mayo.
Desde el sector, no creen que el Gobierno busque negociar con las petroleras para congelar o evitar más aumentos en los combustibles ya que los principales indicadores son externos a lo que sucede puntualmente en el país.