Las políticas públicas, como instrumentos, debe enfocarse en fortalecer la actividad y la gestión del
Estado en redistribuir la riqueza, garantizar el acceso y permanencia en el sistema educativo y a los bienes culturales , insertando a jóvenes de diferente estratos sociales al mundo laboral formal. NO mas meritocracia. El aporte y la transformación debe estar enfocada en el niño o joven vulnerado, posibilitando que llegue a la universidad, el niño «bien» ya lo tiene garantizado o no le interesa porque cuenta con capital.
No obstante la inclusión es necesaria y los políticos deben contar con una planeación juiciosa y han de responder a una necesidad vigente.
Para lograrlo, un elemento fundamental que toda política pública debe contener es el valor u objetivo que se va a preservar. En algunos casos, este valor puede ser nublado por los intereses de los actores involucrado. Son muchos los elementos que confluyen al momento de tomar una decisión de política pública: Lo sustantivo en lo social pasa por la educación y por la generación de puestos de trabajo para bajar el indicie de desempleo que abunda en nuestro país.

El bienestar social depende básicamente de la macroeconomía y de las políticas públicas del área social.
Para el año en curso, se asume una recesión moderada y una inflación superior al 30 por ciento se debe seguir trabajando.

Fundamental apelar al sinceramiento para consolidar a futuro las metas sociales en el marco de un crecimiento sostenido.
La distribución del ingreso mejoró con el kirchnerismo, y este modelo deberá seguir profundizando medidas que apoyen al estado de bienestar que tanto necesitamos, buscando la recuperación del salario real y que la economía inicie el proceso de recuperación para que las jubilaciones , el sistema previsional y las paritarias logren ubicarse por encima de la inflación.
El ideal fallido de Mauricio MACRI «pobreza cero» ( nunca alcanzado ) no fue un ideal utópico, fue solo un slogan de campaña. No mas marketing !!! mas políticas estructurales y transformadoras !!!- por favor-

» SUSANA BADR»Editorial del domingo

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