Lucas Colombero, dialogó con Mientras Tanto, para realizar un balance de lo que fue su campaña solidaria de recolección de útiles escolares para colaborar con los niños que menos tienen en este nuevo ciclo lectivo » Este, no fue como el año pasado, no se pudo recolectar tantas cosas como esperábamos. La realidad es que es un momento muy difícil para todos».
Cuando se comenzaron a recibir los primeros pedidos de ayuda por parte de las familias que se sabían imposibilitadas para comprar los útiles para los niños de la casa, se dio inicio a la campaña solidaria que involucró a toda la comunidad, incluidos los comercios locales. En cada librería de la ciudad había una caja, identificada por al fundación, donde cualquier persona podía colaborar con útiles escolares que, posteriormente, serían donados a quienes más los necesiten.
Las expectativas, no fueron alcanzadas, pero desde la fundación intentarán dar solución a cada pedido «Si bien no se pudo recolectar todo lo que queríamos, nosotros contamos con una platita que vamos a invertir en útiles y así poder aportar un poco más.»
Por otro lado, Colombero destacó que los comercios todos los años colaboran con las instituciones educativas con distintas donaciones, pero este año, lo harán a través de la fundación, que será un puente entre ambos. «Como fundación somos un paliativo a la realidad»
Desde la fundación se reunieron con docentes de las escuelas y realizaron visitas personales a cada hogar indicado, y las mochilas serán entregadas en los próximos días.
Todavía las cajas están en las librerías, y se puede seguir colaborando durante todo el año.